Publicado el mayo 15, 2024

Su sistema de autoguiado no es un piloto automático para ir más cómodo; es la herramienta estratégica para liberar hasta el 90% de su suelo de la compactación y rediseñar por completo la eficiencia de su finca.

  • El autoguiado permite establecer un plan de tráfico controlado (CTF), creando «autopistas» permanentes por donde pasan todas las máquinas.
  • Este sistema protege la estructura y la biología del suelo en las zonas no transitadas, aumentando la infiltración de agua y la disponibilidad de nutrientes.

Recomendación: Deje de pensar en «ir más recto» y empiece a diseñar el «Trazado Maestro» de su explotación, una inversión en el capital más valioso que posee: su suelo.

Muchos agricultores que invierten en un sistema de autoguiado por GPS lo celebran como el fin de la fatiga al volante. La máquina traza líneas perfectas, el solapamiento se reduce y las largas jornadas se hacen más llevaderas. Es, sin duda, una mejora notable en la comodidad y la precisión inmediata. Sin embargo, quedarse en este primer nivel de uso es como comprar un smartphone de última generación solo para hacer llamadas: se está ignorando el 95% de su verdadero potencial transformador.

La conversación habitual se centra en la precisión centimétrica, en si elegir una señal RTK o conformarse con EGNOS, y en las evidentes economías de insumos. Todo esto es importante, pero es solo la punta del iceberg. El verdadero cambio de paradigma no reside en la precisión de la pasada individual, sino en la constancia de todas las pasadas a lo largo de los años. ¿Y si la verdadera revolución del autoguiado no fuera simplemente optimizar cada operación, sino redefinir la relación fundamental entre sus máquinas y su suelo?

Este artículo propone una nueva visión: su sistema de guiado no es un accesorio, es el sistema nervioso central de una nueva forma de gestionar su finca. Le mostraremos cómo esa simple línea A-B, que hoy le ayuda a sembrar derecho, puede convertirse en la primera piedra de un sistema de «autopistas invisibles» que protegerá la estructura y la vida de su suelo, optimizará el uso del agua y la energía, y sentará las bases de una agricultura más resiliente y rentable para el futuro.

A lo largo de las siguientes secciones, exploraremos los fundamentos técnicos, estratégicos y biológicos para convertir su inversión en autoguiado en el pilar de un sistema de tráfico controlado. Descubrirá cómo diseñar un plan de tráfico, cuantificar sus beneficios y, lo más importante, cómo empezar a gestionar el verdadero capital que se esconde bajo sus pies.

La precisión que necesita, ni más ni menos: qué señal GPS elegir para fertilizar, sembrar o cosechar

La primera decisión al implementar un sistema de autoguiado es elegir el nivel de precisión, y esto no es una cuestión de «cuanto más, mejor». La elección depende directamente de las operaciones que vaya a realizar y del nivel de inversión que esté dispuesto a asumir. No tiene sentido pagar por una precisión de Fórmula 1 si sus necesidades se asemejan más a las de un transporte comarcal. En España, el abanico de opciones permite una adaptación muy fina a cada tipo de explotación, desde el cereal de secano hasta el viñedo de alta densidad.

Las señales gratuitas como EGNOS ofrecen una precisión de pasada a pasada de aproximadamente un metro, suficiente para tratamientos fitosanitarios básicos o esparcido de estiércol. Sin embargo, para establecer las bases de un sistema de tráfico controlado, donde la repetibilidad año tras año es crucial, se necesita una precisión mayor. Aquí entran en juego las señales de corrección por suscripción como TerraStar o CenterPoint RTX, que ofrecen precisiones de entre 15 y 2.5 cm. Estas son ideales para siembra, fertilización de precisión y la mayoría de labores en cultivos como el olivar o el maíz.

Finalmente, la señal RTK (Real-Time Kinematic) es el estándar de oro. Con una precisión inferior a 2.5 cm, no solo garantiza una repetibilidad perfecta de las pasadas, sino que es un requisito para ciertas prácticas de agricultura de precisión subvencionadas. De hecho, para acceder a algunos ecorregímenes de la nueva PAC en España, como la aplicación variable de insumos, es fundamental contar con un sistema de este tipo. Como confirma un análisis técnico, el sistema RTK permite alcanzar precisiones de 2.5 cm, siendo fundamental para acceder a los ecorregímenes de la PAC española. Además, en muchas comunidades autónomas existen redes RTK públicas (como ITACyL en Castilla y León o RGAN en Andalucía) que, mediante una conexión a internet, permiten acceder a esta precisión a un coste reducido.

La siguiente tabla resume las opciones más comunes en el mercado español para ayudarle a tomar la decisión más informada.

Comparación de señales GPS para agricultura en España
Señal GPS Precisión Cultivos Recomendados Operaciones Ideales Coste Aproximado
EGNOS ~1 metro Cereal de secano Aplicación fitosanitarios básica Gratuito
TerraStar/RangePoint RTX 15-30 cm Olivar superintensivo, cereal Fertilización, siembra 600-800€/año
CenterPoint RTX <2.5 cm Viñedo en espaldera, maíz regadío Siembra precisión, plantación 1200-1500€/año
RTK 2-2.5 cm Todos los cultivos precisión Todas las operaciones críticas 1500-2000€/año + estación base

En definitiva, elegir la señal no es un gasto, sino una inversión estratégica. Una precisión adecuada es la base sobre la que se construirán todas las futuras optimizaciones de su sistema de tráfico controlado.

El trazado maestro: cómo diseñar las líneas de guiado de sus parcelas para optimizar cada pasada y minimizar las maniobras

Una vez elegida la precisión, llega el momento más estratégico y, a menudo, subestimado: el diseño del Trazado Maestro. No se trata simplemente de trazar una línea recta A-B en la primera pasada del año. Se trata de un acto fundacional que definirá la logística de su parcela para los próximos años. Un buen diseño de las «autopistas invisibles» minimizará las maniobras en cabecera, reducirá el tiempo muerto, optimizará el uso de la maquinaria y, lo más importante, confinará la compactación a las mínimas rodadas posibles.

El diseño ideal depende de la forma de la parcela. Para parcelas rectangulares, una línea A-B paralela al lado más largo suele ser la opción más eficiente. Sin embargo, para parcelas irregulares o en pendiente, las líneas adaptativas o de contorno son superiores. En las laderas de los olivares de Jaén, por ejemplo, seguir las curvas de nivel no solo facilita la operación, sino que es una medida fundamental para luchar contra la erosión. Este enfoque contrasta con las largas y rectas pasadas en los campos de cereal de Castilla y León, donde la eficiencia pura es el objetivo.

Vista aérea de parcela agrícola española mostrando diseño optimizado de líneas de guiado GPS
Escrito por David Soler, David Soler es un ingeniero en telecomunicaciones que lleva 12 años dedicado a la implementación de soluciones Agrotech, especializándose en IoT, software de gestión y robótica agrícola.